"Nada podemos esperar sino de nosotros mismos" | SURda |
|
07-11-2014 |
Las interpretaciones del voto "NBA"
La discusión sobre la interpretación de los resultados electorales no cesa, y ante algunas cosas que se dicen no hay más remedio que meter cuchara. Esta nota se refiere, antes que nada a reconocer los hechos objetivos.
Lo que me extraña es que en toda discusión entre los más activos están los que no deberían darle tanta importancia al tema, los compañeros que promueven el "NBA" (voto nulo, en blanco, o abstención) y por lo tanto no conceden mucho valor al voto.
Soy de los que no atribuyen mayor valor al voto como instrumento para el cambio,social, pero sí como instrumento de medida. Pero eso a condición de medir correctamente.
Por eso no puedo coincidir con determinadas evaluaciones que se han hecho sobre la presencia "NBA" en estas elecciones, al que se le atribuido una gran importancia.Vayamos por partes.
En primer lugar, la bolsa "NBA" suma peras con manzanas. El voto en blanco o anulado es una cosa, la abstención (no votar) es otra muy diferente. Creo que meter todo eso junto es una distorsión.
A su vez, cuando se dice que esa bolsa ha crecido, hay que hacer algunas aclaraciones.
El padrón de habilitados ha venido creciendo sistemáticamente de elección en elección, como producto del crecimiento vegetativo, que en nuestro país es bajo pero existe. Si se quiere hacer un análisis que incluya las abstenciones no hay más remedio que tomar las cifras en relación al total de habilitados.También el tema de los habilitados para votar es un tema político que curiosamente ha sido ignorado por todos. Se discute la imputabilidad penal de los entre 16 y 18 años, pero esas personas están impedidas de votar y por lo tanto ni siquiera de participar en esa decisión. Lo mismo que los presos,¿cuál es el fundamento de negarles el derecho al voto?
Va un cuadrito comparativo tomando 2009 y 2014:
------- 2009 -------- --------- 2014 ---- Variación
-------------------------------------------------------------------------
FA..... 1105262 43,12 1134187 43,28 2,62
PN..... 669942 26,13 732601 28,58 9,35
PC..... 392307 15,30 305699 11,66 -22,08
PI..... 57360 2,24 73379 2,80 27,93
UP..... 15428 0,60 26869 1,03 74,16
PERI... 17835 0,68
PT..... 3218 0,12
Válidos 2240299 87,40 2293788 87,52
anulads 26950 1,05 33419 1,28
e/blco 22828 0,89 44688 1,71
solo SI 14410 0,56
obs anl 199 0,01 222 0,01
Emitids 2304686 89,91 2372117 90,51 2,93
Habilit 2563397 100,00 2620791 100,00 2,24
--------------------------------------------------------------------------
abstenc 258711 10,09 248674 9,49 -3,88
bl+anul 64387 2,51 78329 2,99 21,65
Como hemos calculado los porcentajes respecto al total de habilitados, son un poco inferiores a los que han sido divulgados que están calculados sobre los votos emitidos o sobre los votos a los partidos, según los casos. Por ejemplo acá el FA tiene un 43% y no un 48 o 49, y así los demás partidos.
Para comparar, hemos debido incluir los ítems que están presentes solamente en una elección y no en las dos. El PERI y el PT no estaban en 2009, en cambio presentamos en 2009 el voto en blanco desagregado en "blancos puros" y "blancos rosados" que votan en blanco a la elección partidaria pero incluyen el voto por la reforma de anulación de la ley de caducidad. En el 2014 no incluimos la reforma por la baja porque no interesa a efectos de lo que queremos evaluar,
Vamos a separar los en blanco y anulados de la abstención.
Sobre la abstención tres cosas: a) No creció sino que por el contrario bajó, pese a lo que se dice. b) Es un tutifrutti al que no se le puede dar un significado político. c) Y en estas condiciones concretas abstenerse era equivocado.
Hubo unas diez mil abstenciones menos en 2014 que en 2009. Pero además debemos tomar ese dato en relación al padrón de habilitados, que crece,y por lo tanto esa baja es más importante. En relación a lo que debería haber sido si se mantuviese el mismo porcentaje de abstención que en 2009, son 15000 menos.
De cualquier manera no es relevante porque es una diferencia muy pequeña de medio punto porcentual, una oscilación dentro de lo usual y en el entorno de los valores históricos de siempre, de alrededor del 10%. Es una baja no significativa.
En la abstención hay cosas muy diferentes, y por eso no puede expresar una orientación política. Están los muertos recientes, la gente que está fuera del país, los enfermos, los que tienen dificultades de último momento, y los desinteresados totales. Es imposible discriminar esas cosas.
Pero además en este caso, abstenerse el 26 era un error, porque era medio voto por SÍ a la baja. Por eso nos parece equivocado que los compañeros "NBA" incluyan todo junto, con lo que llamaron también a la abstención sin aclarar este aspecto del problema.
Poner el argumento de que se llama a luchar al mismo tiempo que a abstenerse es una incoherencia. En este caso se está discutiendo la imputabilidad de personas entre 16 y 18 años, que no tienen derecho a votar. ¿Es correcto negarles el derecho de voto? Si no es correcto, si peleamos porque tengan derecho a votar, es porque el voto puede tener algún significado para ellos como forma de expresión política, y más cuando se discute sobre lo que los afecta a ellos. Los pibes de 16 años (los presos ya es más complicado) puedan pasar a la acción directa. Pero no se puede descartar la escuela intermedia del voto.
Vamos a los votos en blanco y anulados. En este caso sí me parece válido hacer una convocatoria de este tipo (si es lo mejor o no en este caso concreto es un tema totalmente diferente en el que no entramos) esta vez, porque no afectaba en absoluto la pugna por el NO A LA BAJA.
Y hay otras dos diferencias respecto de la abstención. En este caso creció, mientras la abstención bajó. Y si bien también se dice que aparecen allí mezcladas varias cosas que no se pueden discernir entre sí, y es cierto, algo podemos hacer al respecto sin embargo, como veremos.
Estoy juntando votos en blanco con anulados, porque no encuentro razón para diferenciarlos. Dos alternativas son la misma si presentan los mismos efectos (lo que se conoce en lógica como "criterio Peirce"). En este caso el voto en blanco o anulado tienen los mismos efectos, creo que su distinción es puramente subjetiva. En adelante hablamos de todos ellos como "en blanco" para abreviar.Tenemos 78 mil votos en blanco, y hubo 64 mil hace cinco años. Es un crecimiento interesante. Sería también de tan solo medio punto porcentual si lo medimos en relación al total de habilitados, similar a la variación de las abstenciones pero de signo contrario. Considerado en relación a ese universo, esa variación sería igualmente irrelevante. Pero no es así.
Mientras la abstención históricamente se mantiene oscilado en torno al 10%, los votos en blanco vienen creciendo lenta pero sostenidamente en el último tiempo. Parten de un piso irreductible de alrededor del 2%, gente totalmente desinteresada y casos de errores de votación. Para considerar el significado político posible del voto en blanco tenemos que tomar su porción por encima de este piso irreductible.Tenemos un elemento que nos ayuda mucho a medir esto. En 2009 hubo 14 mil votos en blanco a las opciones partidarias que incluyeron la papeleta por el SÍ para anular la ley de caducidad. Fue un total apenas un poco menor a los votos de Asamblea Popular. Se trata evidentemente de un voto político por izquierda que responde al fenómeno que describen los compañeros "NBA".
Si descartamos esos 14 mil y pico del total de votos en blanco tendremos un resto de 1,95% sobre el total de habilitados. Ese es el piso irreductible al que hicimos referencia, que se mantiene históricamente y por lo tanto debemos dejar de lado al atribuir un significado político al voto en blanco.
Por supuesto que como opción política es bastante problemática, Si tenemos que hacer estos cálculos complicados para separar la paja del trigo, no sirve de gran cosa. Pero vamos a hacerlo.
Respecto del 2009, los votos en blanco han crecido unos 14 mil votos. Eso, en relación al universo total, no es significativo. Pero en la hipótesis de un posible voto crítico por izquierda, incluyendo la critica al FA, tenemos un universo mucho más pequeño.
En esto tenemos que actuar con prudencia. Se trata de un universo político pequeño y no podemos sacar conclusiones temerarias de pequeñas variaciones. Pero creo que las cosas son demasiado claras como para errarle. Aquí vamos a dar cifras que tienen el "error de falsa precisión" del que habla Vaz Ferreira. Pero para las conclusiones las vamos a tomar en grueso.
Dentro de esa hipótesis, el voto en blanco por izquierda ha crecido en el orden del 100%. Sin duda es importante.Pero el voto a la izquierda del FA por partidos políticos crece más rápidamente todavía. Crece más de un 200% si tomamos al voto UP+PERI+PT en relación al voto "UP" en 2009 (que sería AP en ese momento). Se nos puede objetar que el PERI es un "partido de izquierda" muy cuestionable como tal cosa. No obstante esto, creo que el voto por el PERI es un voto a la búsqueda de una opción de izquierda. Pero aun sin tomarlo en cuenta, el voto UP+PT ha crecido casi un 100%.
Por lo tango ¿qué significa el crecimiento del voto en blanco? Podemos darle dos significados.
a) Es un voto de rechazo radical a las instituciones burguesas.
b) Es una disconformidad concreta con las opciones que se presentan a elecciones.
Si se tratase de la primera interpretación aun en todos los casos, es obvio que estamos frente a un fenómeno muy pequeño en relación al universo total, unos 30 mil votos sumando el crecimiento habido más los votos "banco-rosados" del 2009, que sería el piso del cual se parte.
Podemos sostener que el crecimiento del voto institucional de izquierda es muy lento e inoperante -y yo comparto esa idea- pero es evidente que el posible crecimiento del voto en blanco por rechazo radical es menor todavía, aun si le diésemos ese significado a todo su crecimiento.Si todo el crecimiento del voto en blanco fuese por crecimiento del rechazo radical a las instituciones burguesas deberíamos estar viendo en este período un crecimiento similar en la agitación política extra-institucional. No es lo que estamos viendo.
Lo que vemos en el movimiento social en todo este período son dos cosas diferentes. Hay un crecimiento lento pero sostenido de la lucha social directa, con variaciones muy bruscas y breves. Pero se trata de luchas por reivindicaciones económicas o por derechos democráticos, siempre dentro del sistema. Y por otro lado vemos una presencia permanente de la agitación política extra-insititucional de contenido antisistémico, pero que no crece de ninguna manera. Por el contrario, ha descendido lenta pero permanentemente durante toda la década frenteamplista.
Sería muy extraño atribuir al voto lo que no se ve en la calle. Y no es muy coherente decir que el rechazo a las instituciones burguesas crece exclusivamente dentro de las instituciones burguesas.
Por lo tanto me inclino a interpretar el crecimiento del voto en blanco como una disconformidad concreta o malestar con las opciones político-partidarias que se presentan, y no más que eso.
Pero resulta que "eso" es enorme. Es evidente que esa disconformidad es por la izquierda, y tenemos que medirla dentro de ese pequeño universo de la izquierda extrafrenteamplista. Y por más imprecisas que sean nuestras posibilidades de medición, no hay como errarle. Vamos a las cifras.
2009: "bancos rosados": 13410. Esos más Asamblea Popular: 29838
2014: Partidos de izquierda: 48014. Posible voto en blanco de izquierda: 28352. TOTAL: 76396
Crecimiento de todo ese espacio: 46528, o sea un 155.93%
Esta es la buena noticia, veamos la mala, que puede no ser mala según se vea.
El voto en blanco por izquierda, si es una disconformidad con las opciones partidarias de izquierda, estaría diciendo algo así:
Mañana, cuando haya otras condiciones, tal vez yo también salga a romper todo. Pero AHORA denme un instrumento de expresión que esté a mi alcance, al alcance de una expresión MASIVA y no de un puñado de héroes autoproclamados.
Voto en blanco por izquierda en relación al total del espacio de izquierda: 37.11%
En relación a los partidos de izquierda: 59.05%
Hemos crecido mucho pero muy mal. Si el voto en blanco representa un rechazo radical al sistema, es muy poco significativo. Y si representa una disconformidad concreta con los partidos de izquierda en la escena actual, es más que significativo. Algo nos está diciendo.
Empecemos por escucharnos a nosotros mismos.
Copyright © 2007 SURda All rights reserved. webmaster@surda.se | |